En el marco de la conmemoración del 25 de abril, Día de la Liberación de Italia, la Cámara de Comercio Venezolano-Italiana (CAVENIT) seccional Bolívar reafirma su compromiso con los valores fundamentales que dieron origen a la República Italiana: la libertad, la democracia y la justicia social.
Esta fecha histórica recuerda el final de la ocupación nazi y del régimen fascista, así como la culminación de la Segunda Guerra Mundial en suelo italiano. Fue establecida oficialmente como feriado nacional en 1949, a través de la Ley núm. 260, por iniciativa del entonces primer ministro Alcide De Gasperi, en honor a la liberación de ciudades emblemáticas como Milán y Turín ocurrida el 25 de abril de 1945.
La efeméride no solo representa un momento crucial en la historia de Italia, sino que también simboliza el esfuerzo colectivo de miles de ciudadanos —hombres, mujeres, jóvenes y ancianos— de todas las ideologías y clases sociales, que se unieron en la resistencia contra la opresión nazi-fascista. Gracias al sacrificio de estos patriotas, conocidos como partisanos, Italia pudo renacer como una nación democrática.
Para CAVENIT Bolívar, recordar este día no es un acto meramente conmemorativo, sino un ejercicio de memoria activa. Es una oportunidad para rendir homenaje a quienes soñaron con una Italia libre y plural, y para reafirmar los valores que sustentan nuestra convivencia democrática: respeto, inclusión, justicia y participación ciudadana.
«Hoy más que nunca es vital preservar las raíces antifascistas y los principios consagrados en la Carta Constitucional italiana. La historia nos demuestra que la paz, la libertad y la democracia son conquistas que requieren defensa constante, especialmente en tiempos de incertidumbre global», expresó la directiva de la seccional Bolívar.
Desde la región Guayana, CAVENIT Bolívar extiende un saludo fraterno a toda la comunidad ítalo-venezolana y reitera su compromiso con el fortalecimiento de los lazos históricos, culturales y económicos entre Italia y Venezuela, bajo la premisa de que la libertad y la solidaridad son el verdadero motor del progreso.